20 de octubre de 2017

TOP: 10 cosas que estuvieron de moda (y ya no lo están) en la música cofrade (parte 1ª)

La típica frase de que "la Semana Santa es una fiesta de contrastes" va mucho más allá de un simple tópico bonito que soltar en mitad de un pregón como recurso cuando el que lo está diciendo no tiene ni idea de qué decir (es fácil decir "oh, qué bonito el contraste de hermandades de silencio y con música; oh, qué bonita esa mezcla entre la alegría y tristeza; oh, que bonito que en la Semana Santa se habla de la Muerte y la Vida..." cuando de eso ha escrito ya todo el mundo), sino que tiene mucha parte de verdad, aunque una verdad también más prosaica que poética.

Y es que una de las cosas más llamativas sobre la Semana Santa es que, como una celebración que se ha quedado anclada en el siglo XVII en todos los aspectos (estéticamente el arte predominante es el neobarroco, ese otro "arte" del aparentar también es muy de la sociedad barroca, por no decir que hasta ideológicamente muchos cofrades se han quedado anclados en el 600 con la única salvedad de que hoy día quemar brujas, homosexuales, herejes e infieles no se hace, aunque me da que no se hace porque sería...no sé... ilegal), sea a la par una celebración que se mueva mucho al calor de las modas.

Y la música cofrade, que es lo que nos ocupa, es quizás el submundo dentro de las cofradías donde las modas son más evidentes y más globalizadas. Lo podemos ver hoy en día como se han puesto de moda los cambios de Agrupación a Cornetas, como en este estilo lo está "petando" el estilo "rosariocádiz" y muchas bandas están apostando por montar su repertorio o marchas de su clase, como rara es ya la banda de Cristo que no tiene tubulares o una marcha con trémolo en los platos, o como un tal Giulio Romano Caccini gracias a la música cofrade se está volviendo a llevar el mérito de una cosa que hizo un ruso de apellido Vavilov (pobre Vladimir que le están haciendo la de Escámez: un olvido intencionado solo porque que una pieza sea de un compositor renacentista italiano de apellido Caccini parece más comercial y "culto" que decir que la realidad, que es una obra contemporánea de un ruso apellidado Vavilov). La modita de las marchas de Ferrer, que todas las Hermandades que tienen una coronación o aniversario vayan en busca de Hurtado, las millones de Puertas Abiertas que se hacen, que las marchas ya no se marquen en la calle, el regreso de los xilófonos en las Agrupaciones, la de momento tímida irrupción de las trompas en las bandas de Cristo (y encima mal usadas la mayor parte de las veces), los clappers, aros apagadores y demás parafernalia que todos usan porque se la han visto usar a tal o cual banda (y sin saber bien para qué sirven)... para bien o para mal son modas, son cosas que unos hacen y otros ven y lo siguen sin cuestionarse, solo por no quedarse atrás....

....Y como toda moda, llegará un día que se queden atrás y pasen al cajón del olvido. ¿Qué, que no se lo creen? Ahora lo veremos con esta lista de 10 cosas que estuvieron de moda (y ya no lo están) en la música cofrade:

10 - Las boinas: 
Para que vean que esto de las modas no es nada nuevo, empezamos con una moda de hace bastantes años. Corrían los años 80 y el auge popular que en Sevilla alcanzó la Agrupación de Arahal hizo que muchas bandas quisieran sumarse a la corriente. Se fundaron muchas Agrupaciones en Hermandades (algunos casos tan llamativos como el de la actual Tres Caídas de Triana que empezó siendo Agrupación, las cosas de la vida), muchas bandas de Cornetas se cambiaron de acera y adoptaron cosas de esta banda. Muchas de ellas no se quedaron como modas pues hoy permanecen (el propio estilo es claro heredero de aquello y las marchas han permanecido como grandes clásicos), pero lo que sí pasó como moda fue un complemento muy distintivo de esta banda: la boina.
En estos años muchas de estas bandas que siguieron el ejemplo de Arahal y también, como no, alguna que otra banda de Corneta tomó esta prenda para la cabeza en sus uniformidades por aquellos años 80. Bandas como Jesús Despojado (la que hoy es Virgen de los Reyes) por ejemplo la usaron.
Como toda moda, una tendencia desbancó a otra, y en este caso fueron las gorras de plato, tanto negras/grises como Cigarreras como blancas al estilo "marinero" de Triana. Las boinas desaparecieron casi por completo del panorama musical cofrade permaneciendo hoy día si acaso en la propia Arahal y en pocos casos más, la mayoría bandas de pueblo y muchas con estilo "militar".

9 - La doble uniformidad (blanca sobre todo):
Nos vamos ahora a los primeros lustros del presente siglo XXI. La década de los 2000 fue una época de cierto auge para la hoy archiconocida banda de las Tres Caídas de Triana, especialmente en los años de publicación de sus trabajos discográficos A la memoria y Todo Pureza (2002-2004). Las nuevas tecnologías, el ya normalizado acceso a Internet, aquellos chats cofrades en IRC,... junto con el auge que hubo en estos años de certámenes ayudaron a dar el definitivo impulso a Triana de ser una banda conocida en los ambientes cofrades más "frikis" (en el buen sentido de la palabra) o jartibles a ser una banda con una fama más generalizada y que cualquier cofrade, aunque no tuviera coche, pudiera conocer al detalle todo sobre ellos y su actualidad.
Esto llevó a que Triana fuera imitada mucho más allá de solo su repertorio ya registrado discográfico, y una de las cosas donde se notó ese boom imitativo fue en la imagen, y concretamente en estos años en un aspecto: usar una doble uniformidad, es decir tener un uniforme para a diario y otro diferente para tu Hermandad. Claro, hubo casos donde esto se limitaba a detalles del uniforme, pero los casos más sangrantes y llamativos llevaron a la total carencia de personalidad de, sí, imitar el uniforme blanco marinero de Triana. Así se dieron casos de bandas que aunque lo más cerca que estaban del mar era cuando se iban de vacaciones a Fuengirola, se vestían de marineros de manera incongruente y sin sentido, solo por imitar. Algunas bandas que llevaron doble uniformidad blanca fueron por ejemplo las Angustias de Alcalá la Real (¡¡JAÉN!!), el Nazareno de Priego de ¡¡CÓRDOBA!!, el Nazareno de cierto pueblo que no quiero acordarme también de ¡¡CÓRDOBA!! (como dato la banda desapareció al año siguiente de hacer esa compra a mi parecer totalmente innecesaria), el Nazareno (también) de Villa del Río ¡¡CÓRDOBA!!,... vamos, como vemos todas ellas bandas de localidades plenamente costeras y marineras (nótese la ironía). Otra que lo llevó, llevando al extremo eso de copiar (porque hasta su Hermandad copia cosas de la trianera) fue la homónima de Granada que en este caso tenía excusa por la relación de la Hermandad con la Marina.
Como moda que fue, cuando se pasó el capricho, la mayoría de estas bandas han ido desechando la idea del uniforme blanco, siendo hoy bastante pocas las que lo mantienen.

8 - Los fliscornos bajos:
Por seguir en esta misma época  y con la misma banda fuente de la que las demás bebieron para la moda, ponemos ahora un ejemplo de que la instrumentación de las bandas también está sujeta a modas.
Sobre la misma época que la anterior (creo que el disco "A la memoria" fue el primero que los incluyó) las bandas de Cornetas se debatían entre buscar mejoras musicales pero no enfadar a los puristas, se buscaba incluir en las cornetas lo que algunos llaman la "quinta voz", una voz grave que rellenara algo más armónicamente las composiciones y supliera esa "carencia" (entrecomillo porque para mí no es una carencia, el estilo era como era, es como si decimos que una tuna tiene carencias porque no incluya un contrabajo por ejemplo). El caso es que en aquella época, por alguna razón, me da que había más temor a las críticas que en la actualidad (curiosamente, hoy que hay redes sociales y mucho hateo, las bandas de Cornetas ya te meten cualquier cosa sin reparos y nadie pone en duda la denominación del estilo) y la Banda de las Tres Caídas tiró de ingenio. ¿Cómo meter un instrumento que ocupe esa clave de Fa sin parecernos a una Agrupación, es decir, sin echar mano de trombones y bombardinos para que no nos critiquen los puristas? La respuesta fue meter un instrumento que se pareciese a los que ya había metidos y aceptados (fliscornos), que diera esa sonoridad pero se "camuflara" bien. Y ese instrumento fue el llamado fliscorno bajo o melófono (aunque hay quien les da el mismo nombre creo que no es el mismo pero los menciono así porque así viene en ciertas partituras), instrumento más conocido en las march bands americanas, que en apariencia es como un fliscorno grande, con una sonoridad entre bombardino/trompa pero que se toca horizontalmente y de ahí que se disimulara más que si se hubiera metido todo lo demás.
El experimento funcionó: las marchas de Triana no solo no ganaron esa profundidad de un grave sino que además se logró que pasara desapercibido. Y claro, con los años, como sigue sucediendo hoy, todo lo que hace Triana se copia sin preguntarse para qué sirve y muchas Bandas de Cornetas empezaron a comprar de estos instrumentos (otras en cambio, en vez de copiar, echaron mano de instrumentos graves habituales -trombones y bombardinos-) hasta el punto que muchas lo usaban, aunque cabe preguntarse si sabían bien por qué lo usaban y cómo se usaba dicho instrumento.
Pero, ¿qué pasó? Como con todo, las bandas que van a la cola de la vanguardia y que se guían por imitar, van tarde. Las bandas referentes (Cigarreras, Triana, Presentación,...) comenzaron a levantar la veda y se empezó a ampliar la instrumentación para dotar de otros timbres al bajo e incluso de más profundidad. Aparecieron trombones, bombardinos, trompas y tubas y, claro, ya este "exótico" (dentro de lo cofrade) instrumento ya se quedaba obsoleto, y muchas bandas que lo habían comprado por moda pues se vieron con un instrumento al que, con las nuevas instrumentaciones, ya no sabían qué uso darles. Unas lo dejaron de usar y los tienen quizás de adorno en sus locales, otras los mantienen ya por rentabilizarlos dándoles el papel de bombardino la mayor de las veces, incluso sé de un caso de una banda que los compró y ni siquiera llegó a estrenarlos. No sé por qué pero veo un futuro bastante parecido a las (ahora están empezando a ser cansinas) tubulares...

7 - Los solos de flautín:
¿Cómo, que en las Bandas de Música -palio- no hay modas? Claro que sí las hay, lo que pasa es que al ser menos mediáticas que las bandas de Cristo pasan más desapercibidas, pero las hay tanto a nivel uniformidad (los uniformes estilo Carmen de Salteras), como de repertorio/autores (la moda actual de, cada uno en su clase por supuesto, Víctor Ferrer y David Hurtado u otros casos que veremos más adelante), o como la que quiero reseñar ahora que tiene que ver con la instrumentación, o mejor dicho, con el protagonismo que adquirió un instrumento que no lo solía tener tanto.
Corría la primera década de los 2000, muchas modas se dieron en esta época y no demasiadas para bien, una década que en parte fue bastante oscura y sobre todo para el que de siempre había sido el estilo con mayor consideración a nivel de entendidos como es el de las bandas de plantilla completa. No se puede negar, fueron años difíciles para las Bandas de Música, difíciles en el sentido de que progresó más un estilo de música facilón y pegadizo que se aupó apoyándose en el nulo criterio de quienes eligen repertorios (pensando que un silencio de negra es una mujer de color que no habla) dejando en la estacada a muchísimos buenos autores, relegando al olvido a otros del pasado y dejando en los cajones muchas obras maestras. Suerte que la resistencia de algunas bandas, la aparición de trabajos de investigación (gracias, Patrimonio Musical) y los lanzamientos de ediciones discográficas con recuperaciones del pasado que pusieron en valor esas buenas obras, pudieron contener (no eliminar, todavía resiste parte de ese catetismo) algo que de haber seguido con ese auge hubiera sido fatal para la historia de la música cofrade.
Ese estilo facilón, basado en melodías sencillas, armonías básicas y cadencias evidentes encontró en el fenómeno de las petaladas, cohetadas y griterío su perfecto marco de desarrollo, y la tendencia se basó por ello en las marchas que más efecto causaban en esas orgías de catetismo barato. Una de ellas era Rocío de Vidrié cuyo solo de flautín que desencadena en su tutti en fortissimo causaba ese efecto de euforia desmedida entre las chillonas que frecuentan y fomentan estos momentos de aplausitis petalae.
A imagen de la mencionada marcha, muchos autores vieron en esta forma de componer y en este elemento, el solo de pícolo o flautín, una forma de medrar popularmente, sucediéndose en apenas unos años varias marchas que incluían ese soniquete pseudorociero, flautín y "tamboril" incluido para posteriormente "reventar" en un efectista fuerte de la banda que arranque el típico y tópico aplauso del ¿respetable? que presencie el momento, y por supuesto hablamos de marchas de escasa calidad musical. De estos años nos sonarán títulos que se propagaron pronto como Aires de Triana, Reina de Triana o Tu Dulce Mirada, un caso muy significativo pues hablamos de un autor no demasiado malo como era Juan José Puntas que en estos años vendió su música a las modas sacrificando la calidad por la fama. Pero estas tres fueron quizás las más famosas, porque muchos autores menores y muchas bandas pueblerinas tiraron todavía más del recurso.
La propia sobreexplotación del fenómeno acabó por desgastarlo y aunque estas marchas de flautines siguen siendo protagonistas en las petaladas, los autores, al menos los que aspiran a cierta calidad en su obra, han hecho la cruz a seguir esta senda, para fortuna nuestra y del género.

6 - Los pañuelos:
Muchas de las modas que veremos aquí, obviamente tendrán que ver con uniformidades y/o elementos de las mismas pues, como en la moda misma, la ropa es la primera afectada. Y también muchas de las modas que estamos y vamos a tratar provienen de Sevilla puesto que hablamos de la Semana Santa más mediática y por tanto con las bandas más mediáticas y más "influencers" que se dice ahora.
La siguiente moda tiene que ver con uniformidad pero fue uno de esos casos que no, no provino de Sevilla, aunque sí vino de una banda mediática (de otra forma no hubiera sido así, claro). En el año 2008 la ínclita Agrupación Musical "La Pasión" de Linares estrenaba su nueva (actual) uniformidad, un uniforme que basaron en uno del brigadier José de Palafox de los tiempos de la Guerra de la Independencia (Independencia española eh, de más o menos inicios del XIX, aquí imagen) y que tenía un detalle poco o más bien nada visto en uniformidad de bandas: el pañuelo al cuello.
Como toda cosa novedosa y llamativa, muchas bandas que cambiaron sus uniformes estos años se fijaron en el detalle y lo imitaron sin piedad, imitación a la que ayudó a propagarse que una de las primeras bandas en copiar el detalle fuera curiosamente de Sevilla, la por entonces exiliada Agrupación de los Gitanos que sacó su uniforme (que luego reformarían para dar lugar al actual) en 2009. Azotes de Écija, Cristo del Mar de Vélez-Málaga, Angustias de Cabra, Angustias de Alcalá la Real, Valme de Dos Hermanas, Santa Cecilia de Aguilar de la Frontera, el Perdón de Alcázar de San Juan, la Cruz Roja de Tobarra y cierta banda de un pueblo de Córdoba del que como Cervantes decía no quiero acordarme, fueron algunas de las bandas que siguieron esta moda por estos años de 2008 a más o menos 2010-2011, algunas de las cuales de hecho ya no lo llevan hoy.
Como decimos, una moda quita otra moda. El resurgir de las corbatas (moda que sigue vigente hoy día) a raíz de una nueva ola imitadora de Triana (bastante tardía si tenemos en cuenta que el uniforme de Triana es de 2005) y sobre todo a raíz del nuevo uniforme de la Presentación de Dos Hermanas (que sí fue por estos años) sustituyó como elemento de cuello y cortó la moda de los pañuelos de los que ya no encontramos ni rastro en uniformes estrenados en años posteriores a los referidos.


Van cinco modas que lo fueron y ya no están reseñadas, y estoy viendo que el texto se está alargando bastante. Así que, ¿por qué no dejar las 5 últimas -o primeras, según se vea- para una segunda parte y que no sea tan largo? Tengo las 5 pensadas ya, pero acepto cualquier sugerencia en comentarios, que puedo incluir como alguno de los puestos o si acaso como mención honorífica.
Os emplazo a que leáis la segunda parte...cuando la suba, claro.

3 de octubre de 2017

Bandas infravaloradas: Afligidos de Puente Genil, la eterna lucha de ir a contracorriente

(Aviso: había considerado necesario explicar mis inquietudes musicales y creo que me he pasado. Si se lo quieren saltar, abajo aviso cuando empiezo a hablar directamente de la banda).

Siempre, desde que tengo "memoria musical", me he considerado una persona con un criterio musical por desgracia considerado diferente o raro.
Mientras la gente le gusta hacer las tareas o relajarse escuchando reggaeton (juro que he tenido que buscar en Google cómo se escribe bien esta mierda) o flamekito-fusión, yo lo hago escuchando a grandes autores de la música universal (Mozart, Schubert, Wagner, o las Tres BBB -Bach, Beethoven y Brahms-, por ejemplo) lo mismo que cualquier día me puedes encontrar escuchando alguna pieza del romanticismo musical checoslovaco (me encanta escuchar El Moldava de Smetana, puro nacionalismo musical -creo que es el único nacionalismo que me gusta-) o soñando con las maravillas del Impresionismo musical (el Claro de Luna de Debussy, Dios...) por no decir que soy un enamorado de Chopin (y más desde El pianista y esa escena con la Balada nº 1 en Solm -una putísima maravilla, todo, con perdón de la expresión-). O, mientras la mayoría de gente considera "La voz" a cantantes de medio pelo como cuando se puso de moda el tal Justino ese, para mí las voces que podría llegar a reconocer son las voces únicas como las de Freddie Mercury o Sinatra. Me gusta Queen, me gusta Guns N' Roses, me gusta la mayor parte del rock clásico, y si quiero declarar amor con música, antes que con una canción empalagosa prefiero hacerlo con baladas de Scorpions (Still loving you) o Led Zeppelin (Stairway to Heaven).
Si soy raro, pues muy orgulloso de serlo, oye.

En música cofrade me pasa igual, y no es algo reciente. Desde pequeño recuerdo tener inquietudes hacia marchas que la gente hoy considera raras, aburridas, complejas. De hecho, mi marcha favorita hasta que descubrí Saeta cordobesa (Dios, que tarde la descubrí) era Virgen del Valle, la cual en mi infancia recuerdo que sí era muy tocada tras las Vírgenes de esta tierra que me tocó por pueblo. Incluso la seguí prefiriendo en aquel periodo que escuchaba cantos de sirena y me dejé embaucar por Caridades y Callejuelas varias (todos tenemos periodos oscuros en la vida).
Y en mis recuerdos musicales cofrades, si echo la vista atrás, los que más me impactaron tenían que ver con esa clase de música. A mi memoria se vienen lo maravillosos que eran los antiguos Martes Santo de los años 90 con Dulce Nombre de Marchena tocando aquellas marchas tan adelantadas a su época tras el Cautivo mientras la Esperanza caminaba con AMUECI sonando, por increíble que parezca, marchas como Virgen del Valle, Pasa la Virgen Macarena, Cristo en la Alcazaba,... es más, tengo grabado a fuego el palio de esta Dolorosa caminando en la oscuridad por la calle Cigüela sonando precisamente Virgen del Valle. También recuerdo al Nazareno de Villa del Río con aquellas marchas propias de un todavía desconocido Jesús Lora (idea futura: hablar de autores infravalorados también), a la Agrupación de Almodóvar a la primera a la que escuché (tocada de aquella forma, eso sí) Sangre en tus Clavos (que por muy así que fuera tocada todavía seguía siendo impactante), o la primera vez que escuché fragmentos de marchas de Redención de Córdoba como Señor de San Basilio, Angustias de María o Acógeme en tu Reino en una colección de DVD de la Semana Santa de Córdoba que adquirí,... todos estos momentos en los albores de la década de los 2000.

(Inciso, para los que no les interesen los datos de mi vida, a partir de AQUÍ empiezo a hablar de la banda, mis disculpas por enrollarme)

Así llego a, no recuerdo si 2002 o 2003, cuando otro momento supone parte en mi despertar. Como digo tuve mi época oscura de escuchar Caridades y cosas así, pero en aquel año hubo un certamen (aquellos primeros certámenes de la Borriquita, en su teatro, sin su barra ruidosa llena de gente que presta más atención a su cerveza que a la banda, con bandas de buen nivel,... esos sí eran certámenes, qué tiempos). A aquel certamen venía una Agrupación precedida de bastante buena reputación: "vienen los Afligidos", se decía. Y yo no sabía quienes eran los Afligidos.... hasta entonces.
Se suben a aquel escenario y recuerdo una marcha que me dejó sorprendido. Aquella marcha era Señor de los Afligidos, su autor, lo conocería después, Antonio Moreno Pozo. Para un chaval que la mayoría de las veces lo más gordo a lo que estaba acostumbrado era a Consuelo Gitano aquello fue no un soplo, sino un vendaval de aire fresco. No fue ahí cuando comencé a saber que otra forma de hacer música cofrade era posible (eso lo descubriría cuando me comencé a interesar más en los aspectos teóricos de la música) pero si fue un buen antecedente, una buena carta de presentación de esta Agrupación de las que hoy musicalmente más estimo (en lo personal no tengo el gusto) y a la que siempre deseo los mayores éxitos que puedan tener.

Creo que no hay banda que no merezca más una entrada aquí, ser considerada una de las bandas, si es que no la que más, infravaloradas de todo el panorama cofrade, que los Afligidos de Puente Genil.
Con unos 20 año de historia fundada en el seno de la Hermandad pontanesa de Santa Cruz, la Agrupación de Nuestro Padre Jesús de los Afligidos tiene todos los ingredientes que tiene, o se le suponen, a una banda grande, las exigencias que se les deberían hacer a esas bandas capitalinas que, por ser de ciudades, los cofrades creen que tienen mejor preparación.
Y es que, sin ser banda de "ciudad" (entrecomillo porque Puente Genil, tercer municipio tras la capital y Lucena en habitantes de la provincia, es bastante grande como para considerarse ciudad pequeña), corrijo, Afligidos no es que tenga, es que incluso en muchos aspectos supera a bandas consideradas grandes, y cuando decimos aspectos nos referimos a aspectos puramente objetivos en cuanto a música se refiere (es de lo que trata esto, ¿no?). Desgranemos:

En repertorio nos encontramos uno de los mejores repertorios de Agrupación Musical, tanto en la selección de temas como en las composiciones propias. De lo primero, aunque el tópico le asigna a esta banda la etiqueta de fúnebre, la selección de temas de otras bandas es bastante amplia y heterogénea, moviéndose desde el clásico más clásico, pasando por el clásico Mena, hasta marchas, claro que sí, más serias, pero también con algunas marchas de toques flamencos, aunque eso sí, siendo una selección donde, mayormente, prima la calidad (salvo alguna concesión a la galería como la empalagosa y sobrevalorada...Y al Tercer Día), e incluso manteniendo marchas que en sus bandas de origen se dejaron de escuchar por no estar acordes al gusto mayoritario, siendo esta banda un oasis al que acudir si se quieren escuchar marchas como Al Alba, Prendido en San Lorenzo, Angustias en tu regazo,...
Del plano propio, Afligidos puede que sea la primera banda no capitalina (tras Pasión de Linares) en arriesgarse a tomar un estilo propio y no imitar lo ya existente (en este aspecto creo que incluso mejoran a los de Linares ya que la base de Pasión se sustenta mucho en la Estrella de Dos Hermanas y Redención de Córdoba con la suma de influencias de otras, teniendo mucho repertorio de autores con estilos marcados y vinculados a otras bandas). Y sí, es un riesgo porque normalmente las Hermandades quieren o buscan algo que les toque lo típico que ya han escuchado a otras. La gran parte de culpa de esto la tiene que entre los fundadores de la Agrupación y como director musical durante largo tiempo esté la figura de Antonio Moreno Pozo, uno de los más grandes compositores de la música cofrade en general (tan grande como su ego, eso también es verdad), revolucionario, con un estilo muy personal en la que las influencias del nacionalismo musical andaluz y de la música Impresionista y Romántica (que, sin entrar en profundizar, pues se parecen mucho) se dejan ver, con una manera de ver el "andalucismo" en la música cofrade muy diferente al típico gitanismo o alhambrismo que alumbra la mayoría de machas procesionales hoy calificadas de "flamencas". Cualquier marcha es gran ejemplo, como también son grandes ejemplos marchas de otros grandes autores actuales como Cristóbal López Gándara, José María Sánchez Martín o Nicolás Barbero Rivas (este último autor de Consolatrix Aflictorum, una auténtica joya barroca). Un repertorio y patrimonio musical excelso que ha quedado reflejado en la discografía de la banda, recomendando personalmente su último disco "Me siento Afligido", una grabación que, en un mundo donde no triunfase la mediocridad, debería ser considerado una auténtica pieza de colección y culto.

En el plano musical, la Agrupación goza de una calidad intepretativa y unas cualidades muy muy buenas. La banda sabe "suplir" su no tan numerosa plantilla (pues no es la típica banda de 120 músicos tan de moda hoy) y de hecho desmiente la falsedad de dos falacias que la música cofrade hoy toma como ciertas: ni una banda es mejor cuantos más músicos tenga y, como dice el anuncio, la potencia sin control no sirve de nada. Se nota que es una banda que está acostumbrada a una rutina de afinación, la armonía de las diferentes cuerdas está muy bien compensada, cada instrumento sabe su papel y lo que tiene que hacer,... cosas que las bandas de nivel medio o medio-alto no hacen, o inclusive me da que pocas grandes lo hacen a este nivel. Todo esto viene a raíz de su tercera gran virtud.

La preparación: Afligidos es quizás una de las bandas con músicos mejor preparados. Sin llegar a ser profesionales la mayoría de ellos, como bien dice la Agrupación en su web, al menos un gran porcentaje de sus músicos posee conocimientos musicales, ya que la Agrupación cuenta con su propia Escuela de Música, una escuela no creada como recientemente se están creando muchas incluso en bandas con larga trayectoria, sino que la Agrupación al parecer contó con ello, con este afán de formar a sus músicos, desde prácticamente sus inicios.

Todas estas características nos dan la visión de una Agrupación que, a pesar de los pesares y a pesar de que pueden pagar un alto precio por ello (escuché recientemente en un vídeo genial sobre música que el precio a pagar por ser diferente, por salirse de la norma, es el "shaming", la marginación social), lleva a gala, casi como un dogma, una filosofía, una manera de entender la música, en la que se denota no ya un interés, no ya una afición. Se ve un clarísimo AMOR a la música, porque es amor cuando algo se trata con tanto cuidado y respeto, siendo muy pocas las bandas que presuman de seguir una filosofía similar (la mayoría tienen afición por la música, no amor a la música) por no mencionar la amplia mayoría de bandas que ni siquiera tienen una filosofía personal y se limitan a seguir impulsos y tendencias. Por ese amor a la música y ese seguir una filosofía de vida a pesar de los pesares es por lo que tanto empatizo con la música de esta Agrupación... y por lo que tanto me ha costado saber con qué palabras exactas escribir sobre ellos.

Precisamente ese es el punto "negativo" en contra de esta banda. Los pollos que levantan la cabeza demasiado son los primeros que la pierden en el matadero, y en un país en el que la envidia es deporte nacional y una sociedad cuadriculada en la que, como dice una serie que he visto recientemente y que trataba sobre el bullying (más o menos), "mucha gente se siente tan infeliz que buscan hacer sentirse infelices a los demás". Hemos basado nuestro mundo tanto en una idea de seguridad ante todo lo que nos es conocido, ante todo lo que nos es habitual, ante todo lo mediocre (entendido como cosas de nivel medio aptas para todos) que sentimos inseguridad ante todo lo que se salga de la norma y lo desplazamos, nos sentimos insultados por aquel que nos supere en algo y en lugar de tratar de aprender y alegrarnos actuamos con ira y odio y les deseamos lo peor. Tener personalidad en un mundo cada vez más impersonal es considerado como una ofensa, y bueno, siempre ha sido considerado así (¿acaso los más grandes genios y artistas no han sufrido vidas traumáticas o desprecios como alto precio a pagar por los dones que les han sido entregados?).
Y bueno, Afligidos no es que tenga una vida dramática a lo Kurt Cobain, ni tampoco es que sufran un exagerado bullying por ser diferentes (Dios les libre) pero sí es cierto que el paralelismo está ahí: siendo una Agrupación excelente no tiene los contratos que uno podría imaginar a ese nivel y hay contratos en localidades importantes que una vez los consiguen pronto son sustituidos ¿porque no dan la talla? No, porque no gustan a los de siempre, los de abajo. No tienen una plantilla nutrida de músicos porque es una verdad que no es que haya muchos músicos cofrades a los que de verdad les guste tanto la música como para hacer lo que les guste y nada más, y la gente le achaca los típicos tópicos de banda de estilo "fúnebre", son aburridos, son raros,... vamos como prejuzgamos al ver al típico geek o nerd, a alguien con el pelo rosa, o vestido de negro,... sin pensar si esa persona podrá ser un excelente pintor, un músico genial, un gran científico,... o lo que es más, sin ver su interior y conocerlo del todo y saber la riqueza que tenga su personalidad.

La de Afligidos, en el fondo, es la misma historia de siempre, la historia vivida una y otra vez en una sociedad como esta que juzga con dureza al que no sigue lo que sigue el resto, la historia del eterno debate entre ser como los demás quieren y gozar de aceptación o ser fiel a uno mismo pero pagando un alto capital social, la historia de juzgar las cosas por lo que parezcan y no por lo que son, la de abrazar la mediocridad en busca de la integración y de una sensación de felicidad (bastante artificial) o sacrificarse en pos de un camino que intente llevar a marcar la diferencia siendo la máxima meta posible la genialidad y quien sabe si con ello la posteridad.
Uno es un camino fácil, cómodo, sencillo de seguir pero sacrificando lo que eres o parte de lo que eres. El otro es más doloroso pero quizás culmine de una manera satisfactoria a nivel personal. Ambos completamente válidos pues cada cual es libre de seguir el que quiera, y en ambos se tiene que pagar un elevado peaje para tomarlo, pero solo uno de ellos lleva a no caer en el olvido. Y tal vez, si un día la historia de la música cofrade para pasos de Cristo se estudiase con la misma seriedad que para Bandas de Música de plantilla completa, quien sabe si en el futuro no se hable más de bandas con personalidad como el caso de estos músicos pontaneses. El tiempo, como dije con Polillas, dictará sentencia, pero mientras lo hace o incluso si no lo hiciera a su favor, al menos sepan estos músicos que cuentan con la valoración más que positiva de los que, como ellos, amamos la música a niveles que van más allá del mero entretenimiento.

Puntos a resaltar: la Música en todos sus niveles, aunque quizás el mayor punto fuerte esté en la formación musical que la banda tiene por filosofía en dotar a sus músicos a través de su propia escuela. Ser de las pocas Agrupaciones no grandes ni capitalinas en gozar de una personalidad propia, lo que los hace ser únicos, y por tanto, valorados "per se": Afligidos sabe que el que contrata y se queda con Afligidos lo va a hacer porque le gusta Afligidos y no porque lleve marchas de la banda X o Y.

En su contra: adoptar una filosofía propia tan marcada quizás conlleve que la banda sea vista como lejana por el público mayoritario. Una forma de "apertura" podría ser, sin renunciar nunca a la filosofía, tal vez sí acercarse de alguna forma, aunque la línea para hacerlo sea muy sutil. No ser de ciudad (y/o de la provincia de Sevilla) afecta negativamente a los prejuicios que se tienen sobre cualquier banda. Se hace muy buena música en algunos pueblos pero hay que saber abrir los oídos (y la mente) para conocerlos.