25 de marzo de 2020

Pasando (de) la cuarentena: los colores de la Semana Santa. Hoy: el MORADO

LOS COLORES DE LA SEMANA SANTA. EL MORADO:

Empezaremos esta serie por uno de los colores más frecuentes, que más podemos ver en nuestra Semana Santa: el MORADO.
El Papa Francisco en la misa del Miércoles
de Ceniza 2020.
Foto: desdelafe.mx

El morado, y toda su gama, es como sabemos un color que proviene de la mezcla del rojo y el azul, mezcla por tanto de un color cálido y otro frío, siendo un color oscuro y profundo, proveniendo su nombre del latín morum, que es el nombre de la mora, el fruto del moral (gracias Wikipedia).

Debido a esa profundidad, al morado se le otorga en muchas religiones una gran carga espiritual, y así es también en el cristianismo, siendo usado en la liturgia en los tiempos de preparación espiritual como son el Adviento y la Cuaresma.
El Gran Poder con túnica lisa
Foto: wikipedia

Es también por ello el color de la penitencia, y por ende es utilizado por muchísimas cofradías. De hecho, como color de la penitencia, no es de extrañar que la Madre y Maestra de las cofradías de Sevilla, la del Silencio, vistiera a sus primitivos nazarenos de este color.
Muchísimos ejemplos del morado en nuestra Semana Santa podríamos poner. En las imágenes para vestir pasionistas de Cristo es muy habitual (y muy correcto, aunque las modas ahora den por vestirlas de blanco en verano, cosa nada relacionada con la liturgia) encontrar túnicas y mantolines morados ataviándolas (un gran ejemplo -fuera del debate túnica lisa/bordada- es la típica túnica morada lisa que desde hace un tiempo suele llevar el Señor de Sevilla, el Gran Poder, en su Estación de Penitencia).
En muchas localidades el morado lo podemos ver especialmente en los cortejos de Hermandades de Jesús Nazareno, presentes en sus hábitos, en las túnica de las imágenes del Señor cargando con la Cruz (aunque algunas por las modas cada vez menos), en sus enseres, en sus palios en el caso de que la cotitular no tenga advocación con color propio,... y también lo vemos en la Cuaresma y en Vísperas, en la salida de diversos Grupos Parroquiales y/o Pro-Hermandades, que acertadamente usan este color pues, como se ha dicho, el morado es el color litúrgico de la Cuaresma.
Aparte, también en ocasiones lo podemos ver en los exornos florales de otros pasos de Cristo. Un ejemplo curioso (más visto en otros lugares) es el uso de la flor del cardo, cuyo color es éste, y es que el cardo, a su aspecto espinoso y a la flor que lo corona con este color, es una planta que simboliza también la penitencia (mencionar en bordados algunas túnicas “de los cardos” que poseen algunas Hermandades en sus ajuares).


Aparte de su sentido penitencial, el morado es en la liturgia el color de la aflicción, del duelo, y es por ello que es el color litúrgico de las celebraciones de difuntos y de las exequias (aunque normalmente relacionemos el negro con esto). De ahí que el morado sea un color predominante en el exorno floral habitual de pasos que representan a Cristo muerto como Hermandades del Santo Entierro, Mortaja, Traslado al Sepulcro,.. (aunque otras veces se venga usando el rojo, color que digamos es incorrecto usar el Viernes Santo, ya lo mencionaré) o incluso en su cera (aunque el amarillo tiniebla sea el más habitual para la cera de este tipo de Hermandades).


En resumen:
Morado: color de rigor espiritual y penitencia. Color válido para cualquier Hermandad penitencial y para cualquier imagen (salvo las que tengan un color con una simbología específica), sobre todo las que representen pasajes de la Pasión y Muerte de Cristo, y para las Hermandades de corte fúnebre.
Incorrecto usarlo en cualquier Gloria y se debería suponer que también incorrecto usarlo en procesiones en tiempo ordinario (extraordinarias).

No hay comentarios:

Publicar un comentario