5 de julio de 2016

Don Alberto Escámez y el respeto a su figura

Hablar de Don Alberto Escámez López es hablar del nacimiento de un estilo y de prácticamente el predecesor de toda la música cofrade para pasos de Cristo. Nacido en Linares (sí, el creador del que muchos "puristas" quieren ver como el estilo sevillano por antonomasia nació en esa ciudad a la que algunas cuentas fakes sevillanas con intereses ocultos tienen cierto escozor anal) Escámez marchó con su familia a Málaga donde entró en contacto con la centenaria Banda del Real Cuerpo de Bomberos y con la que dio lugar al estilo de cornetas y tambores cofrade con la composición de marchas pensadas especialmente para las procesiones (sí, el estilo que muchos "puristas" quieren ver como el estilo sevillano por antonomasia tampoco nació en la "cuna", sino que es más malagueño que los verdiales, la Rosaleda o la calle Larios y la Alameda, por mucho que las Hermandades -por ejemplo- y discográficas se empeñen en falsear la verdad atribuyendo a Sevilla dedicatorias de marchas como Cristo del Amor, El Santísimo Cristo de la Sangre, Cristo Viejo,...). La Milagrosa (o Nuestra Señora de Consolación y Lágrimas según a quien leas) parece ser que fue la primera y a ella le siguieron marchas indispensables en los repertorios de todas las bandas de cornetas de España. Si bien no solo marchas de cornetas "sencillas que cualquiera sería capaz de hacer" (ahora entenderán por qué digo eso) hizo: Escámez no era un "juegaencore" o "silbador" más, era un compositor que realizó mucho más allá de obras para cornetas, teniendo en su catálogo obras como marchas para bandas de plantilla completa, zarzuelas, cuplets, y un largo etcétera. Incluso dirigió bandas de música, la última de ellas en Adra pocos años antes de fallecer en 1970.

La figura de Escámez, a pesar de estar omnipresente en el estilo de cornetas y tambores, casi siempre está olvidada, aunque en estos días ha saltado a la actualidad por esto:

Personalmente de entrada, ese comentario por su más que pésima escritura (hay gente que escribe mal, pero no tanto y además cualquier "mojabragas" del cornetita de Baza sabe que Baza se escribe con Z) y su evidente exageración y manifiesta ignorancia (demasiada para ser cierta), a mi me parece más un comentario obra de algún "troll" o algún comentario fake por parte de alguna cuenta fake (valga la redundancia) para ganar retuits y petarlo en este periodo estival por lo general aburrido en lo cofrade (a pesar de la moda de los comunicados que nos están asfixiando este verano). Lo que no quita que, aunque no tan ignorantes, bien es cierto que mucha juventud piensa así y así lo manifiesta (especialmente proveniente de fandoms como Trianers, Rosariers y Presentacioners y, en menor medida, Cigarrers).

Si bien mucha gente ha tomado como veraz este aparente comentario en alguna red social, y ello ha suscitado oleadas de indignación y vergüenza ajena que han alzado voces pidiendo respeto hacia el creador de las cornetas y tambores como estilo cofrade.
Pero, ¿es ese respeto real? ¿En verdad la gente se ha molestado o solo ha saltado por impulso para no quedar evidentemente incluidos en ese grupo que piensa igual que ese "chaval"? Porque yo creo que aquí sucede como cuando alguien con tendencias homosexuales las reprime por convicciones religiosas o morales: para intentar no pasar por uno más, sus ataques suelen ser más airados y exagerados intentando tapar su latente sentimiento con la mayor de las homofobia. Pues igual aquí el "witerio" patrio ha quedado tan avergonzado de su compadre que para evitar que los comparen, aunque en su vida hayan prestado atención a nada de Escámez, hoy lo defienden a capa y espada.

Y es que, para mi no, ese respeto al maestro por parte de la gran mayoría de musiquitos patrios no es real. Siempre he denunciado, lo denunciaba en mi otro blog, que en el mundo de las cofradías el fariseísmo, la hipocresía, goza de buenísima salud, y este es uno de esos casos.
El latente y repentino sentimiento de cariño surgido ahora hacia Escámez se debe a que este suceso lo ha hecho "trendi", es algo así como cuando hay un atentado en un país que nunca nos ha dolido pero que como ha salido en las noticias cogemos y en Facebook nos ponemos su banderita en la foto de perfil: pura y cínica hipocresía.

Ese respeto al creador de todo esto, al que algunas bandas deben su existencia y fama, del que tanto tiempo se han aprovechado (dudo que algunas bandas hayan pagado derechos a los descendientes de Escámez, si bien hay bandas tan cínicas que sí piden lo suyo por marchas más quemadas que el palo de un churerro, sí, eso es hipocresía), la persona sin la cual los Danis de Bazas, Kinis, Tanos, MaNuS y demás "famosillos" de la corneta no serían nadie ni tendrían estas legiones de engendros que hacen apología de la mayor de las ignorancias, a Escámez se le debería de haber respetado de otras formas y sin embargo su obra y sus logros se han vapuleado vilmente por parte de muchos que hoy se hacen los dolidos.

-Porque a Escámez ya de entrada y estando en vida no se le respetó cuando en los años 40-50 un copista se llevó de Málaga a Sevilla las obras de Escámez a una banda que se acabaría llevando injustamente un mérito que no le corresponde como fue la Policía Armada, adjudicando a Hermandades sevillanas las dedicatorias de marchas que no lo estaban o incluso cambiando de títulos marchas como Cristo Viejo (que se llamó Cristo de la Buena Muerte) o el caso más flagrante Al Pobre Zaragoza (marcha que Escámez dedicó a un compañero fallecido y que en Sevilla se retituló Virgen del Buen Fin obviando dicha emotiva dedicatoria).

-Porque a Escámez no se le respeta cuando los endiosados compositores de hoy día que se creen más importantes que Jesús (parafraseando a John Lennon) y sus séquitos se atreven a mofarse de su obra poniéndolo a la altura de algo menos que un "compositorsucho" debido a la "pobreza" técnica" de sus obras, llegando algunos de ellos -léase este artículo- (No Me GuStArÍa SeÑaLaR a QuIeN, aunque es alguien que le va mucho el corta-pega) a presumir delante de amiguetes que ellos en cinco minutos son capaces de hacer algo similar, eso sí, obviando por supuesto que Escámez no solo hizo esas marchas de cornetas "sencillas", y olvidando el contexto en que Escámez elaboró esas marchas, unos tiempos en los que la corneta no era el instrumento de hoy día, que la técnica no estaba tan avanzada ni tan "profesionalizada" y que Escámez componía para tres voces de cornetas puras, no para las actuales bandas de cornetas "dopadas" hasta las trancas (habría que ver si Escámez viviera hoy día como dejaría en el charco a más de un "Mozart" del Encore).

-Porque a Escámez no se le respeta cuando esos mismos compositores actuales que se creen que han inventado la corneta y el tambor, y las bandas a las que sirven, bajo la excusa del "estilo" prostituyen y violan las partituras originales del maestro para adaptarlas a esas bandas "dopadas" de hoy día llenando los clásicos de tresillos y requinteos innecesarios y bajos que nunca existieron (a lo que llaman "arreglo"), y todo ello, eso sí, sin dar cuenta de derechos de autoría, derechos que se atreven a exigir a otras bandas cuando montan sus marchas.

-Porque a Escámez no se le respeta cuando sus marchas son "marchas de avenidas" y "para que los pasos anden" o "para relajar labio" después de algún "pepino". No se le respeta cuando sus partituras se olvidan en un cajón para sacar marchas dignas de comida rápida cuya fama dura lo que tarda en sacarse una nueva hornada.

-Porque cuando una marca de cornetas como la valenciana Honsuy prefiere el marketing y saca modelos como la "Carmen" pensando en Tres Caídas o le hace cornetas personalizadas al de Baza sabiendo que así tienen un mercado de borregos dispuestos a comprar la misma corneta con un grabado diferente (me recuerda a esto: https://www.youtube.com/watch?v=gXrmi-IcLfw) solo porque lleven el nombre de sus ídolos y nunca hayan sacado una "corneta Escámez" en honor a quien seguramente por ser creador de un estilo, ha dado más a esa empresa que nadie, tampoco es respeto.

-Porque tampoco se le ha respetado cuando alguien en tiempos normales quiere defender la figura de Escámez y es tachado de "rancio" y "anticuado" por ello.

Porque, por estas y muchísimas razones, a Escámez no se le respeta y, cuando la gente se le pase lo del comentario (que, repito, para mí es más falso que la foto de Casillas con Del Bosque), la gente se volverá a olvidar de Escámez y se le seguirá sin respetar.

No seamos cínicos, hagámonos ese favor. No nos dejemos en evidencia que más de uno ha quedado "retratado". Hasta que todo lo anterior dicho no cambie, el respeto a Escámez es y seguirá siendo fingido.  Cosa que nunca cambiará, a las estrellas de las cornetas no les conviene.

El respeto se enseña y no se finge, y de momento, mientras alguien siga pensando que lo clásico es inferior por ser sencillo y menos espectacular, andamos mal encaminados en enseñar respeto a las nuevas generaciones de músicos que olvidarán su pasado y, con ello, la esencia de la música procesional, cada vez más derivada al comercialismo y los fanatismos idolátricos.

1 comentario:

  1. Estimado Don Jesús: me quito el sombrero ante los acertados comentarios que ha escrito sobre el Maestro Escámez. No tengo el gusto de conocerle, pero a este humilde corneta que le escribe, y que tanto añora tocar las marchas de siempre, le ha alegrado el día.
    Un cordial saludo:
    Arturo Cáceres.

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